Y sí que me llegaron mal, nunca me había sentido tan horrible por dentro por cumplir años, qué sería... capaz que esperaba hacer algo grande para estas alturas y no terminé sorprendiéndome mucho... obvio, sorprendiéndoME porque a la final poco o nada importa lo que digan los demás.
En fin, digamos que lo bueno de los 24 fue que me gradué, me casé, conseguí un trabajo más o menos y luego otro super bueno, y en ese trayecto muchas cosas no pudieron cumplirse, como viajar a pasear al extranjero o ya largarnos del todo a Canadá... Pero también cosas buenas, como por fin vivir con la persona que amo y mejorar la relación con mis papás. Y ya en el plano más materialista poder tener una compu "más mejor"y la anhelada cámara de fotos...
Supongo también que no sabía si esperar algún plan maravilloso para el cumple o mejor bajar las expectativas para no decepcionarme. Supongo que terminé yéndome por la segunda opción, así que terminé el viernes con dolor de riñón y lágrimas a mil porque no quería cumplir años, y comencé el sábado con desayuno vegetariano, flores, un feliz cumpleaños y obvio, los ojos hinchados. Al día siguiente fui la invitada "especial" de la fecha, cosa que no ha ocurrido nunca y por supuesto, espero que no se repita, eso de andar en primera plana ya no es lo mío je.
Y que se viene para estos 25? Pues espero algunas cosas, viajar un rato por ahí, sacar más fotos, recibir la famosa respuesta de Dear Canada, mantenerme en este trabajo y bajar de peso.
Ayer llegó mi nuevo lente para la cámara :). Así que ahí va una foto tomada al regalo del marido por el nuevo lente. No es una máquina de foto pero hay que ir practicando.
Galeria de visita a La Habana
Hace 2 meses